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vendredi 31 octobre 2014

LOS ESCOBAS DE GARDEL

“Escobas”, era el vocablo con el que el cantor se refería con afectuosa ironía a sus guitarristas y ellos fueron:
            José Ricardo, elegido por Gardel y Razzano en 1915, viéndole actuar en el Teatro San Martín con la Compañía Tradicionalista Argentina. Permaneció hasta 1929, acompañando primero al dúo y luego a Gardel solista.
            Guillermo Desiderio Barbieri, fue el guitarrista de más larga actuación con Gardel. En 1921 unió su guitarra a la de Ricardo y permaneció junto al “Inmortal tacuaremboense” hasta su muerte en el accidente de Medellín.
            Fue un inspirado melodista. Compuso alrededor de noventa temas, de entre los cuales se destacan “Anclao en París”, “El que atrasó el reloj”, “Preparate pa’ l domingo” y “Viejo smoking”.
Su composición más exitosa es “Anclao en París”, tango que nació a través del correo. Enrique Cadícamo se alojaba en ese momento en el Hotel Oriente de la ciudad de Barcelona cuando recibió una carta de Barbieri desde Niza donde actuaba Gardel, en la que le pedía una letra para musicalizarla y que “El Mago” la cantara.
            Sentado a una mesa en el comedor del hotel, Cadícamo pidió un “carajillo” y mientras fumaba escribió en menos de una hora, la letra de “Anclao en París”. El propio Cadícamo en sus memorias cuenta esta historia: “Mi imaginación voló a Montmartre donde recordaba haber visto a algunos jóvenes compatriotas anclados iniciándose en la cruel manga y a los cuales siempre pude tirarles unos francos salvadores. Aquello podría ser el tema para la letra del tango”.
            Al día siguiente le envió los versos a Barbieri, quien rápidamente compuso la música y Gardel lo grabó en la “Ciudad Luz” el 28 de mayo de 1931.
            José María Aguilar, fue a integrarse a Ricardo y Barbieri en el acompañamiento de “El Morocho” actuando hasta 1930 y reenganchándose en 1935. Fue uno de los sobrevivientes de la tragedia de Medellín.
            Ángel Domingo Riverol, elegido entre varios aspirantes que se probaron con Barbieri y Aguilar. En un momento Gardel dijo: “Me quedo con este”.
            Domingo Julio Rivas, bandoneonista y guitarrista, acompañó a Gardel a partir de agosto de 1931. Como dato anecdótico se recuerda que Vivas en el tango “Silencio”, hace el toque de clarín con su fueye.

            Horacio Pettorossi, se incorporó al grupo de guitarristas en París en 1932, tras un encuentro con Gardel en circunstancias en que iba a filmar en Joinville “Melodía de arrabal” y “Espérame”. Colaboró como compositor, guitarrista y actor en estas dos películas.